Si sois del Madrid o no tenéis miedo a que os salga un sarpullido por que los vuestros son otros colores, os animo a visitar la tienda que ADIDAS ha remodelado en uno de los laterales del Bernabeu.
Lo cierto es que se antoja complicado que aquellos que no son merengues entren en esta tienda que, además de estar el estadio blanco, te recibe con su escudo en la fachada. Pero la marca tiene un lema al que yo me apunto sin duda; «impossible is nothing».
1500 metros cuadrados repartidos en tres plantas con un buen aprovechamiento del espacio. Los productos están etiquetados, pero la ausencia visual de precio es absoluta. Parece un mensaje tácito, «el precio es el que es». Y así es efectivamente, precio alto aunque con una relación con la calidad razonable.
Colores negro y blanco a lo largo de toda la tienda y materiales de construcción en bruto. Suelo con efecto hormigón encerado y tintado en negro en algunas zonas.
El techo está pintado en negro para favorecer el efecto de la iluminación específica. Enfocada sobre el producto expuesto en un mobiliario con aspecto industrial en acero y madera color haya o negro según las familias de producto.
La sensación que provoca todo el conjunto es, desde mi punto de vista, de una tienda un poco clínica. Para ser una marca deportiva, hecho en falta mas imagenes tanto estáticas como en movimiento, al tiempo que cierto dinamismo generado por el producto. Es cierto que los colores no ayudan para ese punto de agresividad que si tienen las tiendas de Nike, pero quizá se hecha de menos algo mas que los maniquíes para atraer a lo clientes, con un producto que debería recordar mas el movimiento.
En este sentido, otras tiendas de la marca, como la de Nueva York, si que parecen tener ese punto mas dinámico. Esto es lo que en otras ocasiones he comentado de la disyuntiva entre la tienda mas comercial y la mas ordenada.
Por lo que se refiere al layout y el circuito, me genera la duda si lo que está es lo que realmente se persigue, por que una vez cruzada la puerta no sabes muy bien por donde deberías continuar. Si el cliente acude a la tienda con su deporte y lo que va a buscar ya pensado, probablemente no tenga mayor dificultad, sin embargo, si la compra es mas relajada y se trata de recorrer para descubrir, el circuito no existe, al menos de manera evidente. Puedes moverte por la tienda como quieras y por la propia estructura y las visuales no es fácil ubicarse. La señalización tampoco ayuda.
El producto oficial del Real Madrid está, como decía, en la planta calle, lo que sin duda es una decisión correcta, pues se trata de artículos de compra mas impulsiva y que naturalmente forman parte importante de la imagen de la marca.
Con todo, me parece una tienda de notable, los detalles están muy bien cuidados y los amantes del deporte o el puro visitante pueden disfrutar de un buen rato y probarse cientos de prendas o comprar desde unas zapatillas clásicas de la marca por un precio razonable, hasta unas Adidas Porche Design de 900 euros.